DE LA PROMESA A LA PROVISIÓN
2° CRÓNICAS 31:5: “Tan pronto como se divulgó la orden, los Israelitas proveyeron en abundancia las primicias de grano, vino nuevo, aceite, miel y de todo producto del campo. Trajeron el diezmo de todo en abundancia”.
Hay un PRINCIPIO ESPECÍFICO en las Sagradas Escrituras que muchos cristianos han pasado desapercibido, sin embargo, este principio es básico y para que veamos la manifestación de las Promesas, y la Provisión y la Multiplicación de Dios se derramen sobre nuestras vidas. Este principio te abre muchas puertas y libera tus promesas y desata muchas bendiciones. Este principio se llama el PRINCIPIO DE LAS PRIMICIAS o de los Primeros Frutos. La palabra original en hebreo para PRIMICIAS es bikkurim que quiere decir “UNA PROMESA POR VENIR”, y comparte la misma raíz de la palabra, “bekhor”, el término que significa “primogénito”. La festividad judía que celebra la FIESTA DE LAS PRIMICIAS, es una de las fiestas más mencionadas en la Palabra de Dios, luego de la Pascua. La FIESTA DE LAS PRIMICIAS celebra y reconoce la mano de Dios de bendición y provisión sobre Su pueblo. La OFRENDA de PRIMICIAS se la ve tan temprano como en el tiempo de Caín y Abel; las primicias, o el principio de las primeras cosas, tiene que ver con dar el todo de lo primero, no sólo una parte, como el caso del diezmo. En los días antiguos, el proceso de reunir las primicias de los granos involucraba esmerados preparativos. Cada familia entre los israelitas tenía que estar atento a los primeros brotes o granos. Una vez que los encontraban, los designaban como primeros atándoles un pedazo de hilo rojo alrededor de la rama, vástago o vid. Cuando los granos maduraban y eran cosechados, esas primicias eran llevadas al templo y presentadas al sumo sacerdote de acuerdo con el modelo de Dios. El sacerdote aceptaba la ofrenda de cada hogar, y la levantaba como una ofrenda mecida bien por encima de su cabeza, presentándola al Dios de Israel en acción de gracias y reconocimiento de Su continua provisión y bendición. Una vez que la ofrenda de las primicias había sido hecha, la gente era libre para disfrutar el resto de la cosecha, debido a que lo primero había santificado el resto. Lo esencial de los primeros frutos no estaba limitado a la vegetación. Se lo encuentra en toda la Palabra, y trata con todas las “primeras cosas”. Dice la Biblia en Éxodo 22:29,30: “No demorarás la primicia de tu cosecha ni de tu vendimia. Me darás el primogénito de tus hijos. 30 También serán para mí tus toros y tus ovejas. Los dejarás con sus madres siete días, pero al octavo día me los entregarás”. Observa bien las instrucciones que Dios dio a Moisés cuando Él preparó a los israelitas para ser guiados para salir de la esclavitud en Egipto. DIOS DEMANDA EL DERECHO A TODO LO PRIMERO – lo primero de los granos, de todo primogénito masculino de ganado lanar y vacuno, todo primogénito macho. Todo lo primero tiene que ser dedicado a Dios por medio de Su pacto. Cada vez que algo es llamado primero, un primer fruto, una cosa dedicada, le pertenece a Dios. No te olvides de esta verdad espiritual: Todo lo primero le pertenece a Dios, y verás las bendiciones de Dios a granel en tu vida. Yo oro que seas prosperado en todo, y que tengas salud, así como prosperas espiritualmente. En el 2013/5773, HONRANDO a Dios con lo primero. BENDECIDO/A ERES POR SIEMPRE CON TODA CLASE DE BENDICIONES.
DECRETO DE FE: “EN ESTE DÍA DECLARO Y DECRETO EN EL NOMBRE PODEROSO DE JESÚS QUE TODO LO PRIMERO LE PERTENECE A DIOS”.
ORACIÓN: “Padre celestial, te doy gracias porque hoy he entendido por Tu Palabra que todo lo primero te pertenece a Ti. Y en este año 2013 hago el firme propósito de darte todo lo primero a Ti, las Primicias, porque quiero acercarme a Ti cada día de mi vida y recibir de Ti provisión sobreabundante durante todo el año. En el Nombre Poderoso de Jesús, Amén”.