miércoles, 16 de enero de 2013

UN CORAZÓN ESTABLE NO SE AFANA

UN CORAZÓN ESTABLE NO SE AFANA 

LUCAS 21:34: "Mirad también por vosotros mismos, que vuestros corazones no se carguen de glotonería y embriaguez y de los afanes de esta vida, y venga de repente sobre vosotros aquel día”. 


¿Qué pasa cuando tenemos el corazón estable? Un corazón estable es el que no se afana. Jesús nos dice hoy: “Mirad también por vosotros mismos, que vuestros corazones no se carguen de glotonería y embriaguez y de los afanes de esta vida, y venga de repente sobre vosotros aquel día”. Jesús nos dice: “Mirad también por vosotros mismos”. O sea por ti mismo, así que deja de estar mirando a otros, por qué criticas, murmuras y dictas sentencia de otros, y no sabes lo que está mal en ti. Como es posible que podamos ver lo que está mal en otras personas, y no ver lo que está mal en nosotros. ¿Qué fue lo primero que Jesús dijo? “Mirad también por vosotros mismos”. Este simple consejo Jesús resolvería tus problemas. Deja de estar echándoles la culpa de tus problemas a otros. Este año 2013 toma la decisión de no perderlo como has perdido otros años, por eso el Señor nos está hablando de cosas básicas para tener un año de éxito: Amarlo a Él sobre todas las cosas y tener un corazón estable, un corazón diferente, porque con el mismo corazón egoísta, engreído y viejo no vas a ver un cambio en este nuevo año, no vas avanzar, y seguirás en lo mismo de años anteriores. “Mirad también por vosotros mismos”, preocúpate por ti. Jesús declaró: “No os afanéis por el vestido, no os afanéis por la comida, no os afanéis por el día de mañana”, el corazón se carga con los afanes de esta vida, y hay un problema porque Jesús declara: “y venga de repente sobre vosotros aquel día”, el día de la venida del Señor Jesucristo y nos tome por sorpresa, porque nuestro corazón no esté afirmado en el Reino de Dios. El corazón que no está afirmado, que no es estable, se carga con las cosas y afanes de este mundo. Cada vez que ves a una persona afanada, su corazón está desconectado de Dios. Pero cuando te conectas con el Reino de Dios, cuando te conectas con las cosas de arriba donde está Cristo sentado a la diestra de Dios, no te afanas por nada. Cuando estás orando por los problemas, no te afanas, la Biblia declara: “Por nada estén afanosos; antes bien, en todo, mediante oración y súplica con acción de gracias, sean dadas a conocer sus peticiones delante de Dios” (Filipenses 4:6). Entiende esto: La cura para el afán es la oración. Buscar el Reino de Dios primero, mirar hacia arriba, tener una conexión tierra cielo. Cada vez que cometemos el error de desconectarnos del Reino de Dios nos afanamos, nos afanamos por lo que no podemos hacer, nos afanamos por lo que no hacen por nosotros, nos afanamos por lo que nos hacen, nos afanamos por lo que nos prometieron y no nos cumplieron, pero cuando realineamos nuestras vidas y regresamos nuestro corazón a Dios y a Su Reino ¿Qué sucede? No hay afán. Por eso mi consejo pastoral hoy es: Afirma tu corazón en Dios, en Su Palabra, no te afanes que DIOS CUIDARÁ DE TI. Gloria a Dios. Yo oro que seas prosperado en todo, y que tengas salud, así como prosperas espiritualmente. EN EL 2013/5773, con un corazón que sabe que Dios cuidará de nosotros. BENDECIDO/A ERES POR SIEMPRE CON TODA CLASE DE BENDICIONES. 

DECRETO DE FE: “EN ESTE DÍA DECLARO Y DECRETO EN EL NOMBRE PODEROSO DE JESÚS QUE TENGO UN CORAZÓN CONFIADO DE QUE DIOS CUIDARÁ DE MÍ”.

ORACIÓN: “Padre celestial, en este día me rindo ante Ti, renuncio al afán, y confío en Ti y en Tu Palabra, y sé que sé que Tú, Padre, cuidarás de mí. En el Nombre Poderoso de Jesús, Amén”.

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